Machiavelli, Niccolò

Discursos de Nicolao Machiaveli. Dirigidos al muy alto y poderoso Señor don Philippe Príncipe de España nuestro Señor

no (aunque nasció en Lipari) porque amos-
tró al pueblo cuán feo et impío era el
usurpar aquel presente por manera que
de consentimiento del universal, dejó
ir a los legados con todas sus cosas, y las
palabras del historiador son estas.
«

Timasitheus multitudinem Religione implevit,
quae semper regenti est similis».
Y Lorenzo de Médicis

en confirmación
desta sentencia dice que todo lo que el Se-
ñor hace lo hacen después muchos por-
que siempre están puestos todos los ojos
en el Señor.

Capítulo treinta. Cómo
un cibdadano que quiera en su república hacer
de su propria auctoridad alguna buena obra es
menester que primero mate las envidias, y en
qué manera se deben de ordenar las defensas
para cuando vengan los enemigos a una ciudad.

Sabiendo el Senado Romano có-
mo toda la Toscana nuevamente se ha-
bía juntado, y concertado para venir
sobre Roma y cómo los Latinos y los Her-

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