Machiavelli, Niccolò

Discursos de Nicolao Machiaveli. Dirigidos al muy alto y poderoso Señor don Philippe Príncipe de España nuestro Señor

de tiempos, y el que tiene este ejercicio
en plática de un volver de ojos sabe en
qué manera está aquel llano, y cómo está
levantada aquella cuesta, adó llega aquel
valle, y todas las otras cosas semejantes, de
lo cual el tiempo pasado tiene hecho una
firme ciencia, y que esto sea así verdad
Tito Livio nos lo muestra con el ejem-
plo de Publio Decio, el cual siendo tribu-
no de soldados en el ejército de Cornelio
cónsul que llevaban para contra los Sa-
nitos, y habiéndose el cónsul metido en un
valle adonde el ejército de los Romanos
pudiera ser encerrado de los Sanitos, y
viéndose en tan grande peligo dijo al
cónsul estas palabras. «

Vides tu Aule Corne-
li cacumen illad supra hostem? arx illa est spei, sa-
lutisque nostrae, si eam (quoniam caecis relinquere
Samnit aes) impigrae capimus». Y primero de-
stas palabras que dijo Publio Decio, di-
ce Tito Livio, «

Publius Decius. Tribunus mi-
litum unum edictum in saltu Colle, imminen-
tem hastium castris, adituarduum impedito
Agmini, expeditu haud dificilem». Adonde
habiendo sido enviado sobre ello por el

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